Fue un privilegio poder compartir este espacio de encuentro de la producción y el consumo ecológico, y en general del sector ecológico, en el que se comercializa productos agroalimentarios ecológicos certificados. En estos ámbitos donde se ve más claramente la necesidad de luchar contra las pérdidas y el desperdicio de alimentos, que nos afecta a todos y cada uno de nosotros… y a los más empobrecidos en mayor medida.

Desde hace ya varios años, el segundo domingo de mes se celebra en Valladolid un ecomercado, gestionado por VallaEcolid (asociación constituida en 2019 en la que se aglutinan productores, elaboradores y tiendas); se trata de una de las concreciones de la «Estrategia alimentaria de Valladolid«, tras el proceso de investigación-reflexión iniciado por la alianza formada entre el Ayuntamiento de Valladolid, la Fundación Entretantos y la Universidad de Valladolid, a la que se adhirieron en 2019 Mercaolid y la Asociación VallaEcolid.

Este año el Ecomercado ha comenzado a dinamizarse dedicando una jornada a diversos temas relacionados con los desarrollos actuales de las políticas alimentarias locales y su concreción en esta ciudad: fermentados y conservas, intercambio de semillas y plantones…
Este domingo 11 de junio estuvo enfocado hacia el aprovechamiento y la prevención del desperdicio alimentario. El ambiente durante la jornada fue muy positivo, y mucha gente se acercó al mercado en el que estuvimos presentes Despilfarroalimentario.org y Encuentro y Solidaridad, acercando a todos los asistentes los trabajos que venimos realizando, así como algunos proyectos de cara al futuro.

Toda la plaza estuvo ambientada con una exposición de fotografías del primer concurso de fotografía «La comida no se tira» y aprovechamos para presentar en primicia la segunda edición de este concurso que se desarrollará entre el 15 de julio y el 15 de agosto.

En uno de los puestos instalamos una serie de materiales de concienciación y trucos para no tirar la comida; destacaban un extracto del libro Los tomates de verdad son feos, las conservas elaboradas por Es-Imperfect para el colectivo #LeySinDesperdicio y el delantal diseñado por #StopDerroche, que se incluye en la cesta de productos del Ecomercado que se sortea entre los asistentes de este domingo.
No podemos menos que agradecer a Vallaecolid, al Ayuntamiento (especialmente a María Sánchez) y a la fundación Entretantos por impulsar el ecomercado y facilitar un puesto para sensibilizar contra el despilfarro alimentario uno de los ámbitos de acción estratégica de la estrategia alimentaria de Valladolid que están todavía en fase de desarrollo: «Reducir y gestionar adecuadamente el desperdicio alimentario y reducir los residuos relacionados con la alimentación».

No olvidamos que estamos a punto de finalizar el Decenio de Acción de las Naciones Unidas para la Nutrición, para luchar contra los casi 800 millones de personas que padecen subalimentación crónica y los más de 2 000 millones de personas sufren deficiencias de micronutrientes. No podemos obviar que una verdadera ecología integral debe incorporar claramente todas las dimensiones humanas y sociales: el ritmo de consumo, de desperdicio y de alteración del medio ambiente ha superado las posibilidades del planeta.